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Buchwald

Ball, Tzara, Bader, Arp, Huelsenbeck: definiciones DADA

Ball


-En rumano, “dada” significa “sí, sí”; en francés, “caballito de madera”. Para los alemanes, es un signo de ingenuidad boba y alegre apego de la infancia.

-El dadaísta lucha contra la agonía y el frenesí mortal de la época. Contrario a cualquier sabia discreción, cultiva la curiosidad de quien encuentra una alegría burlona en la fórmula de rebelión más dudosa posible. Sabe que el mundo de los sistemas se ha hecho añicos y que la época, que cobra sólo en efectivo, ha iniciado una rebaja de filosofías desdivinizadas. Donde comienzan el miedo y la conciencia intranquila en los kiosqueros, comienzan las risas  marcadas y una suave tranquilidad en el dadaísta.

-Dada es una nueva corriente artística [Kunstrichtung]. Se la puede reconocer porque hasta ahora nadie sabía nada al respecto y mañana toda Zúrich hablará de ello. Dada proviene del diccionario. Es simple. En francés, significa “caballito de madera”. En alemán: “adiós, por favor, dejáme en paz, hasta la próxima”. En rumano: “Sí, es verdad, tenés razón, es así. Hagámoslo.” Y así. Una palabra internacional. Solo una palabra y la palabra como movimiento. Es terrible. Si de ello se hace una corriente artística, es porque se quieren eliminar las complicaciones. Dada psicología, Dada literatura, Dada burguesía y, ustedes, estimados poetas, que siempre han poetizado con palabras, pero nunca la palabra misma. Dada guerra mundial y no hay final, Dada revolución y no hay comienzo. Dada amigos y también poetas, los más queridos evangelistas. Dada Tzara, Dada Huelsenbeck, Dada m’dada, Dada mhm’dada, Dada Hue, Dada Tza. 


¿Cómo se alcanza la dicha eterna? Diciendo Dada. ¿Cómo se vuelve uno famoso? Diciendo Dada. Con gestos nobles y elegante decoro. Hasta la locura, hasta la inconsciencia. ¿Cómo se puede eliminar todo lo engreído y periodístico, todo lo bonito y coqueto, todo lo moralizado, animalizado, decorado? Diciendo Dada. Dada es el alma del mundo, Dada es el clou, Dada es el mejor jabón de leche de lirios del mundo.



Tzara


Orden-desorden, Yo-no yo, Afirmación-negación: las irradiaciones máximas del arte absoluto. Caos puro ordenado, absolutamente eterno, en un ámbito de segundos sin duración, sin aliento, sin luz, sin control. // Amo una obra antigua por su novedad. Es solo el contraste lo que nos une al pasado.


Todo producto del asco, que puede llegar a ser negación de la familia, es dada; protesta con los puños, todo ser en acción destructiva: dada; conocimiento de todos los medios, que hasta ahora el vergonzoso compromiso cómodo y la cortesía han rechazado: dada. Destrucción de la lógica, danza de la impotencia de la creación: dada. Toda jerarquía y fórmula social de nuestros servidores: dada; cualquier objeto, todos los objetos, sentimientos y oscuridades, las apariencias y el golpe preciso de líneas paralelas son medios de lucha: dada; destrucción de la memoria: dada; destrucción de la arqueología: dada; destrucción de los profetas: dada; destrucción del futuro: dada; absoluta fe indiscutible en cada dios que la espontánea inmediatez crea.


Johannes Bader


¿Quién es un dadaísta?

Un dadaísta es una persona que ama la vida en todas sus formas inconmensurables y que sabe y dice: no solo aquí, sino también allá, allá, allá está la vida. Así el verdadero dadaísta domina todo el registro de las manifestaciones de la vida humana, desde la auto-burla grotesca hasta la palabra más sagrada del culto en la esfera terrestre que pertenece a todos los hombres.


Arp


Declaro que a Tristan Tzara se le ocurrió la palabra DADA el 8 de febrero de 1916 a las 6 de la tarde. Estaba con mis 12 hijos cuando Tzara pronunció por primera vez esta palabra, que despertó en nosotros un entusiasmo justificado. Esto sucedió en el Café Terrasse en Zúrich, y llevaba un brioche en la fosa nasal izquierda. Estoy convencido de que esta palabra no tiene significado alguno y que solo los imbéciles y los profesores están interesados en más detalles. Lo que nos interesa es la actitud dadaísta, y todos éramos dada antes de que existiera el dadaísmo.


Huelsenbeck


Nobles y respetados ciudadanos de Zúrich, estudiantes, artesanos, trabajadores, vagabundos sin rumbo de todos los países, únanse. En nombre del Cabaret Voltaire y de mi amigo Hugo Ball, el fundador y director de este Instituto de elevada erudición, esta noche tengo una declaración que hacer que los conmocionará. Espero que no sufran ningún malestar físico, pero lo que tenemos que decirles los golpeará como una bala. Hemos decidido reunir nuestras diversas actividades bajo el nombre de Dada. Encontramos Dada, somos Dada y tenemos Dada. Dada se encontró en un diccionario, no significa nada. Esta es la nada significativa, en la que nada significa nada. Queremos cambiar el mundo con nada, queremos cambiar la poesía y la pintura con nada y queremos terminar la guerra con nada. Estamos aquí sin intención, ni siquiera tenemos la intención de entretenerlos. Aunque todo esto es como es, es decir, nada, no tenemos que terminar como enemigos. En el momento en que superen sus resistencias burguesas y asuman a Dada como su consigna, volveremos a ser amigos, sí, los mejores amigos. Por favor, acepten Dada de nuestra parte como un regalo, porque quien no lo acepte está perdido. Dada es la mejor medicina y conduce a un matrimonio feliz. Sus nietos se lo agradecerán. Me despido ahora con un saludo dadaísta y una reverencia dadaísta. Viva Dada. Dada, Dada, Dada.

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